“La economía mundial no estaba preparada para estar cerrada 3 o 4 meses” comenzó diciendo Luis de Guindos, vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE) este miércoles durante un evento digital organizado por CEAPI. Para explicar la magnitud de la crisis, tanto en el plano temporal como cuantitativo, la compara con la ‘Gran recesión’, que llegó […]
BancaDirigentes Digital
| 08 jul 2020
“La economía mundial no estaba preparada para estar cerrada 3 o 4 meses” comenzó diciendo Luis de Guindos, vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE) este miércoles durante un evento digital organizado por CEAPI. Para explicar la magnitud de la crisis, tanto en el plano temporal como cuantitativo, la compara con la ‘Gran recesión’, que llegó a suponer una caída en conjunto del 6% durante toda la crisis, mientras que en este caso la caída del 13%, según calcula el BCE, se ha concentrado en el segundo trimestre de este 2020.
Sin embargo, para el exministro de Economía español, hay lugar para pensar que la crisis será “un poquito menos negativa”, puesto que ya se ha dejado atrás lo peor. “Los últimos datos han sido más optimistas de lo que esperábamos hace unas semanas”, considerando que a medida que las economías se han reabierto, la actividad se ha recuperado. De ese modo, de Guindos avanza que puede producirse un “crecimiento intenso” durante el tercer trimestre, que alcanzaría en torno al 5%, si bien en el último trimestre se moderará y la recuperación total se prolongaría hasta finales de 2022.
También destacó durante su exposición que la respuesta a nivel monetario y fiscal ha sido distinta de la que se produjo en la anterior crisis. El Banco Central Europeo se ha encargado de “inyectar enormes cantidades de liquidez a los bancos” y de comprar deuda, a lo que se suma una “respuesta muy intensa a nivel fiscal”. En particular, de Guindos señala la importancia de una respuesta conjunta, como se espera que sea el Fondo de Recuperación propuesto por la Comisión Europea.
Y recalca este punto porque, de no existir una respuesta conjunta, “se podría producir una evolución a dos velocidades”, como prevén las distintas previsiones a nivel internacional, que sitúan a España como una de las economías más perjudicadas. En ese sentido, que unos países avancen más rápido que otros pueden producir una “fragmentación adicional que no solo sería económica, sino política y social”.
El vicepresidente del BCE también se refirió a la situación de los bancos, que afrontan esta crisis con una “mejor posición de liquidez y capital”. No obstante, incide en que, a pesar de ello, la crisis “va a tener un impacto sobre el sector financiero”.
De hecho, de Guindos expone que los bancos arrastraban una posición de “baja rentabilidad” y que, de hecho, la crisis “va a tener un impacto importante” en este aspecto: “Ahí está el desafío”. Por otra parte, el vicepresidente del organismo monetario europeo cree que los bancos tendrán que mejorar su estructura de costes y, por otro lado, pide que recurran a un instrumento que ya se ha utilizado en el pasado, aunque no lo suficiente. Por ello, de Guindos cree que esta crisis debe conducir a una mayor consolidación del sector tanto a nivel de países como a nivel europeo.