BBVA, ante la incertidumbre en México

La victoria en las elecciones de Andrés Manuel López Obrador ha provocado la intranquilidad de quienes tienen importantes negocios en México. En parte, ese temor tiene que ver con el carácter izquierdista del nuevo presidente y con la posibilidad de que tome medidas como la de expropiar compañía o sancionar determinados comportamientos empresariales.

López Obrador llegó a señalar en la presentación de su programa que “la impunidad privada es especialmente problemática debido a la recurrencia con las que corporaciones financieras, en colusión con las autoridades, delinquen en los mismo términos año tras año”. Sin embargo, el cambio de discurso ha dado tranquilidad a las empresas que operan en México.

En cualquier caso, la actitud que tome López Obrador influirá en la actividad de las empresas, sea cual sea. El rumbo del nuevo dirigente puede afectar en especial a BBVA, una compañía cuyo peso en el país azteca se ha ido incrementando durante los últimos años, e incluso durante los peores momentos de la crisis en España ha visto cómo los resultados en México representaban el 60% de sus cuentas.

En los primeros instantes en que se conoció la elección de López Obrador, BBVA perdió en bolsa un 2,11%, aunque se ha recuperado tras el anuncio de que no se producirán expropiaciones como ha sucedido en Venezuela. Aun así, Francisco González deberá permanecer alerta a lo que suceda en el país centroamericano.

El último año obtuvo el 40% de sus beneficios en México, mientras que la facturación mexicana representa en torno al 28% del total. En los últimos momentos de mandato de Enrique Peña Nieto, González defendió las medidas adoptadas por el presidente saliente.