El ministro de Hacienda de Argentina, Martin Guzmán, dejó el cargo el sábado (2) aludiendo en su carta de dimisión a desentendimientos en la alianza de Gobierno. Le sucede Silvina Batakis, economista que -aunque peronista- dijo creer “en el equilibrio fiscal” y que continuará “el programa económico que el Gobierno ha venido marcando”. El peso […]
InternacionalDirigentes Digital
| 05 jul 2022
El ministro de Hacienda de Argentina, Martin Guzmán, dejó el cargo el sábado (2) aludiendo en su carta de dimisión a desentendimientos en la alianza de Gobierno. Le sucede Silvina Batakis, economista que -aunque peronista- dijo creer “en el equilibrio fiscal” y que continuará “el programa económico que el Gobierno ha venido marcando”. El peso valía 0,007 euro este lunes.
Guzmán renuncia cuando la inflación ronda el 80%, cada mes hay 83.000 pobres más (según un informe de la Universidad Católica Argentina) y la moneda se ha desvalorizado al punto de que 1 peso equivalía este lunes (4) a 0,007 euro. Todo un escenario que contrasta con la visión del presidente Alberto Fernández, que dijo que Argentina está “creciendo mucho”.
Unos días antes, Guzmán había dicho que la deuda argentina era “sostenible" y que observaba una “impresionante recuperación económica”, además de “una tendencia de fortalecimiento de las condiciones de estabilidad, con un país que acumula más reservas, fortaleciendo sus posibilidades de financiamiento”. El peso valía 0,007 euro este lunes.
En su tuit de renuncia, el exalumno de Joseph Stiglitz enumera una serie de resultados que califica de “impresionantes”, como el crecimiento del PIB de 10,4% en 2021, la creación de 1,1 millón de puestos de trabajo, la reducción de la tasa de pobreza de casi 5 puntos en un año y “una fenomenal recuperación de la industria nacional”.
Por ocurrir en un día sábado y por las memorias traumáticas de Argentina con los efectos de renuncias de autoridades -más aún al tratarse del propio hacedor de la política económica- hubo muchas expectativas el fin de semana respecto del comportamiento de los mercados “el día siguiente”.
La reacción este lunes fue lo que aquí se conoce como una mini “corrida cambiaria”, esto es, una demanda extraordinaria de pesos para comprar dólares como un intento que hacen los ahorristas para protegerse de la incertidumbre del rumbo político y económico. Como resultado, uno de los tipos de cambio (CCL) saltó a 282,25 pesos desde los 251,98 en que había terminado la semana previa.
Respecto del dólar, el peso argentino se ha depreciado un 62% desde inicios de 2020 y un 20.000% desde 2002. Hoy es la sexta moneda más devaluada en esa relación, después de Venezuela, Líbano, Zimbabue, Sudán y Siria, según estudios del economista Steve Hanke, de la Universidad Johns Hopkins, especialista en valores y políticas monetarias.
En tanto, en su primer día como ministra de esta nación sudamericana “problemática y febril”, Batakis ha dicho que sus objetivos son “fomentar las exportaciones y revalorizar la moneda nacional”. A pesar de especulaciones políticas sobre su designación, no ha dicho nada respecto de cambios en el acuerdo con el FMI que hereda de su antecesor.
Ante tales coincidencias “técnicas”, resalta el tono político del mensaje que dejó el ministro saliente. “Quien me suceda”, tuiteó Guzmán, “requerirá un acuerdo político dentro de la coalición gobernante” y ”el manejo centralizado de los instrumentos de política macroeconómica necesarios para consolidar los avances descriptos y hacer frente a los desafíos por delante”.
Cómo afronta Latam la inflación y el conflicto social
El curioso caso del dólar arcoiris de Argentina