La familia de fondos multiactivos ODDO BHF Polaris está compuesta por cuatro fondos para diferentes perfiles de riesgo, del defensivo al equilibrado y del flexible al dinámico. Los fondos se diferencian principalmente en su perfil de riesgo, que se define por su exposición máxima a la renta variable. Por lo demás, invierten en una selección […]
| 06 may 2021
La familia de fondos multiactivos ODDO BHF Polaris está compuesta por cuatro fondos para diferentes perfiles de riesgo, del defensivo al equilibrado y del flexible al dinámico. Los fondos se diferencian principalmente en su perfil de riesgo, que se define por su exposición máxima a la renta variable. Por lo demás, invierten en una selección de activos tradicionales, como acciones o bonos corporativos, con un enfoque de inversión orientado a la calidad.
Además de su resistencia a las crisis, los valores de calidad también deberían mostrar un crecimiento estructural, es decir, crecimiento que no dependa de los ciclos económicos. Vemos estas perspectivas sobre todo en torno a temas como la digitalización, la tecnología y la investigación médica, las nuevas tendencias de consumo como el comercio electrónico y los pagos sin efectivo, así como el aumento del consumo en los mercados emergentes. La digitalización de la economía está impulsando la demanda de servicios informáticos en la nube (cloud). Los proveedores de servicios de pagos electrónicos se benefician del crecimiento del comercio por Internet. En los mercados emergentes, las ventas de bienes de consumo aumentan en paralelo a la renta. Además, el envejecimiento de la población es bueno para el negocio de las compañías sanitarias.
Es fundamental identificar los factores a largo plazo que pueden determinar el desarrollo de la economía y los mercados financieros durante años o incluso décadas. Creemos que los principales factores de estas «megatendencias» son la demografía y la tecnología, que están sometiendo los cambios económicos a presiones competitivas. Entre las tecnologías, el uso de la nube y la generalización de la inteligencia artificial están cambiando la estructura de la economía. Por tanto, en las carteras de los fondos ODDO BHF Polaris, tenemos en cuenta las empresas que ofrecen soluciones en la nube, así como las consultoras informáticas que apoyan a otras empresas en la digitalización.
La segunda novedad importante son las nuevas tendencias de consumo: la proporción de la población con afinidad por la tecnología no deja de aumentar. En EE. UU., la proporción de población de baby boomers ―es decir, la última generación dominante de la posguerra, de 1946 a 1964― es ya menor que la de los millennials (de 1981 a 1996). Y es probable que la generación Z (de 1997 a 2012) supere a los boomers en los próximos años y a los millennials en unos 15 años. Los pertenecientes a la generación Z, como muy tarde, ha crecido con el mundo digital y lo entiende como elemento fundamental de su espacio vital. La crisis de la covid-19 y la distancia social han contribuido a acelerar el acercamiento de las ofertas digitales incluso a la población menos joven. El comercio por Internet dio un salto cuantitativo, lo que generó una gran demanda de servicios de pago como PayPal.
Especialmente cuando las valoraciones bursátiles son elevadas, merece la pena invertir en estas tendencias de crecimiento estructural a largo plazo. Esto se debe a que las acciones de estos sectores pueden hacer frente más fácilmente a los contratiempos a corto plazo que siempre pueden producirse cuando las valoraciones son altas. Por tanto, son un componente importante en los fondos multiactivos a largo plazo.
