El oro aún no logra encontrar un suelo. La semana pasada los ETPs sobre oro registraron reembolsos por $119.7 millones, después de que la onza de oro cerrara la semana con una pérdida del -0.81%, cayendo a los $1231. Creemos que el testimonio del presidente de la Fed, Jerome Powell, ante el Senado de los EE.UU, ha influenciado muchísimo en dicho declive. Sus perspectivas optimistas respecto a la economía de EE.UU, cimientan la trayectoria de las subidas de tipos de interés del central para el resto de 2018, respaldando así una mayor apreciación del dólar. Desde comienzos de 2018, el oro se ha visto presionado a la baja (-6.62%) ante la fortaleza del billete verde (+3.17%) generada por dicho entorno de subidas. Asimismo la semana pasada, Larry Kudlow, asesor económico del presidente estadounidense, culpó al presidente de China, Xi Jinping, por trabar los intentos de negociación comercial entre ambos países. En este sentido, el Ministro de Asuntos Exteriores chino, contratacó agresivamente al afirmar que si bien no es partidario de una guerra comercial, no le teme en caso de que se desate una. Ante la ausencia de avances concretos en las negociaciones, parecería que las guerras comerciales se intensifican. Y de seguir siendo así, esperamos que la inflación se acelere a costa de una desaceleración de la actividad económica, lo cual debería favorecer al precio del oro. De acuerdo a la Comisión de Trading de Futuros sobre Materias Primas (CFTC, por sus siglas en inglés), el posicionamiento especulativo neto en los futuros sobre oro, yace una desviación estándar por debajo de su media de cinco años (con datos actualizados al 13 de julio de 2018), lo que resalta el gran grado de pesimismo que prevalece sobre el metal precioso. De todos modos, de cara a esta segunda mitad de año, esperamos que los precios del oro se recuperen.

Los sólidos fundamentos del cobre parecerían desafiar a las amenazas de la guerra comercial: los ETPs sobre cobre captan inversiones por un total de $26.5 millones, el mayor volumen en catorce semanas. La semana pasada se publicaron los datos de crecimiento de la economía china, la cual marca una expansión interanual del 6.7%, apenas inferior a la del 6.8% del año pasado. Sin embargo, los datos mensuales provistos por la Agencia Nacional de Estadísticas muestran un resultado mixto, con una desaceleración en la producción industrial y las inversiones, pero un incremento en las ventas minoristas y los precios del sector inmobiliario. Considerado históricamente todo un barómetro del estado de salud de la economía mundial, los precios del cobre han sido presos de las guerras comerciales y la pérdida de impulso en el crecimiento de la economía china, todo lo cual se ha reflejado en la caída de precios padecida durante las últimas seis semanas, hasta los $6122.5 (con datos actualizados al 20 de julio de 2018). Sin embargo más recientemente, las perspectivas optimistas generadas a partir de sus sólidos fundamentos, ha permitido al mercado del metal rojo superar los escollos de las guerras comerciales, impulsando a los inversores a ampliar su exposición a los ETPs sobre cobre durante las últimas dos semanas. El hecho de que las negociaciones salariales colectivas no hayan llegado a buen puerto en la minera de BHP, Escondida -considerada la mayor minera de cobre a nivel mundial-, deja al descubierto los riesgos a los cuales están expuestos los niveles de oferta actual. De todos modos, dado que el acuerdo colectivo presente vence a fin de mes, se espera una reanudación del proceso de negociación. Teniéndose en cuenta además de que ambas partes desean solucionarlo, es menos probable que se proceda con una huelga. Igualmente, hasta que el acuerdo no sea una realidad, es posible que los precios no retrocedan.

La caída de los precios del níquel lleva a los cazadores de gangas a ampliar la exposición a los ETPs sobre níquel por cuarta semana consecutiva. La semana pasada los precios del níquel cayeron fuertemente en un -3.18%, a su nivel más bajo en casi tres meses, ante las noticias de que el gobierno chino está considerando reducir los incentivos para la compra de vehículos eléctricos a partir del año que viene.