El precio del barril de Brent vuelve a generar temor en los mercados por su impacto en la inflación, que parecía que comenzaba a descender. Sin embargo, las tensiones entre Europa y Rusia están jugando en contra de esta tendencia bajista del IPC a consecuencia de un repunte en los precios del barril de Brent. […]
El precio del barril de Brent vuelve a generar temor en los mercados por su impacto en la inflación, que parecía que comenzaba a descender. Sin embargo, las tensiones entre Europa y Rusia están jugando en contra de esta tendencia bajista del IPC a consecuencia de un repunte en los precios del barril de Brent. Y es que, en lo que llevamos del 2023 el precio ha pasado de los 78 dólares a tocar de nuevo los 87. Lo más preocupante es que lo peor podría estar por llegar.
La Unión Europea ha acordado un tope en los derivados del petróleo ruso de entre 45 y 100 dólares por barril con la intención de reducir los beneficios que puede obtener Rusia por la venta de estos productos. Sin embargo, para minimizar el impacto y perjudicar a Europa, lo que ha hecho Rusia ha sido vender el crudo a países como China y la India con un descuento de 30 dólares por barril, algo que han aprovechado ambos países para vender el crudo a Europa ya refinado con un amplio margen de beneficio.
El impacto en el precio del Brent que tiene esto no es demasiado elevado, sin embargo, la reciente decisión de Rusia de recortar su producción sí. Y es que, el régimen de Putin acaba de anunciar unos recortes de 500.000 barriles al día para mantener el precio elevado. Esto se une, al mismo tiempo, a los recortes de producción que la OPEP aprobó en octubre y que supusieron una disminución de dos millones de barriles menos al día.
Según ha informado Reuters, diferentes fuentes dentro de la OPEP esperan que el barril regrese a ese nivel de los 100 dólares por barril a consecuencia de los recortes en la producción y de la reapertura de China, que está disparando la demanda de combustible por un mayor número de trayectos.
El precio del petróleo en la última semana sube ante el optimismo por las perspectivas de la demanda china.
▪️ Los operadores de opciones apuestan a que los futuros del crudo Brent subirán a 100 dólares en mayo.
▪️ Goldman rebaja las previsiones de precios pic.twitter.com/hILA1AaCIW
— Nelson Baldeon R. (@nbaldeon13) February 10, 2023
Unas filtraciones que se unen a lo que el representante nacional de Irán ante la OPEP, Afshin Javan, aseguró en público y que ratificaban la visión del petróleo en los 100 dólares para el segundo semestre del 2023. "En mi opinión, el retorno del crudo Brent por encima de los 100 dólares en algún momento de 2023 no es inesperado", aseguró.
Fuera de la OPEP, las previsiones también parecen apuntar en esa misma dirección. Sin ir más lejos, Goldman Sachs ha asegurado que ese nivel, el de los 100 dólares por barril, podría llegar en el tercer trimestre del 2023 cuando los recortes de producción y la demanda de China tengan un efecto manifiesto.
El problema del aumento del precio del Brent es su gran influencia en la inflación. Y es que, el ‘oro líquido’ sigue siendo un factor fundamental en el aumento de los precios. Por eso, las subidas de precio del combustible pueden hacer que el IPC de la Eurozona, especialmente, no descienda tan rápido como se pensaba o que se mantenga más elevada de lo previsible. Si esto es así, también puede afectar de manera directa a la política monetaria del Banco Central Europeo, que podría endurecer más las condiciones de lo previsto por el mercado.