En un contexto actual de mercado, donde las dudas con respecto a la inflación, la política monetaria, la falta de suministros y la pandemia Covid-19 se suceden, estos últimos días hemos visto descender en gran medida también al mercado de las criptomonedas. Un claro ejemplo es la importante y veterana bitcoin, que si el pasado […]
En un contexto actual de mercado, donde las dudas con respecto a la inflación, la política monetaria, la falta de suministros y la pandemia Covid-19 se suceden, estos últimos días hemos visto descender en gran medida también al mercado de las criptomonedas.
Un claro ejemplo es la importante y veterana bitcoin, que si el pasado 5 de enero superaba con creces los 46.000 dólares de cotización, y hace cosa de un par de semanas se ponía por encima de los 50.000 dólares, ahora el token digital se encuentra por debajo de los 43.000, tal y como se puede ver en el gráfico de su cotización del último mes .
Fuente: Investing – cotización de Bitcoin en el último mes
Tal y como señala el experto y analista independiente Sergio Valenzuela, “estamos ante una situación complicada a nivel mundial. La Covid no parece dar tregua y esto no es bueno para nadie. Sobre todo cuando se siente la incertidumbre asociada a las medidas y a la situación que comentas. Hay que ser muy consciente que las criptomonedas no son activos ajenos a riesgos sistémicos y mucho menos específicos. Dicho esto, y poniendo el foco en el tema en cuestión, siempre me gusta diferenciar entre criptomonedas y Bitcoin”.
Pero lo cierto es que, en sus propias palabras, es “el precio de Bitcoin marca la salud, y los precios, del resto del ecosistema”.
Tal y como indica el entendido, “Bitcoin es una red global de pagos “libre” cuya moneda (bitcoin) ha sido adoptada por muchos como reserva de valor. Esto se debe a una serie de características únicas e inimitables que no comparte con el resto de criptomonedas ni activos”, y añade: “Desde ahí, si hablamos de invertir, sea en el activo que sea, deberíamos plantearnos unos objetivos a largo plazo por lo que, bajo esta política, lo lógico sería hacerlo en activos con los que nos sintamos alineados. Ya sea al aplicar técnicas de diversificación o por nuestros valores y creencias personales. Si se trata de criptomonedas, esto no puede ser diferente”.
Pero aunque el mundo de las criptomonedas están cada vez en boca de mas gente, la recomendación de Valenzuela si buscamos iniciarnos en la inversión de este mundo de los tokens digitales es que no nos dejemos llevar por las modas y sobre todo, que aprendamos sobre los fundamentales de Bitcoin. “Esto les permitirá afianzarse y tomar conciencia de dónde se encuentran”, matiza Sergio Valenzuela.
Y añade: “Sólo con una base sólida es posible entender cómo emerge todo un ecosistema de innumerables matices y actores, sin morir en el intento. Desconfía, verifica y sé consciente de tus decisiones”.
“El bitcoin y el éter han experimentado una rentabilidad excepcional en el actual mercado alcista, alcanzando nuevos máximos históricos. En concreto, Bitcoin alcanzó algunos hitos clave en 2021 con la compra por parte de Tesla de 1.500 millones de dólares de bitcoin (posiblemente la transacción de bitcoin de más alto perfil). Además, Taproot, la primera actualización en 4 años de la red bitcoin, ha abierto las puertas a los desarrolladores para que integren nuevas funciones que mejoren la privacidad, la escalabilidad y la seguridad de la red”, indica Simon Peters, analista experto en criptoactivos de la plataforma eToro.
“Personalmente siempre he apostado por bitcoin y lo seguiré haciendo mientras no cuente con argumentos de peso que me inviten a lo contrario. Otras criptomonedas pueden servirnos sobre todo para especular a corto plazo”, hace hincapié Valenzuela cuando le preguntamos por cuáles de los tokens apostar.
Y es que para el experto, si tomas la decisión de invertir en otros tokens, debe ser que se deba al convencimiento de una posible aplicación real y “no en base a palabras que no entendemos pero suenan bien en nuestras cabezas”.
Eso sí, con respeto a estas pequeños tokens que han surgido o que puedan ir viendo la luz, el entendido recalca que “siempre hay proyectos interesantes que pueden encajar en un nicho concreto” pero que debemos preguntarnos cuantas veces una empresa pequeña ha llegado a convertirse en multinacional.
“No otorguemos a los proyectos crypto cualidades mágicas que no damos a empresas fuera del sector. Para pensar con claridad tienes que buscar analogías y llevar el caso a un entorno real y conocido. Esto te hace eliminar mitos y pasar a entender muchas cosas que suelen verse borrosas en crypto, fundamentalmente dado el desconocimiento del entorno”, explica.
Y la realidad es que aunque Bitcoin y Ethereum sigan reinando, los últimos datos proporcionados por la plataforma de inversión global eToro es que existen fuertes movimientos en la lista de las criptodivisas más demandadas en España en el cuarto trimestre de 2021.” Solana entró por primera vez en el ránking, hasta ocupar el décimo lugar, mientras que Dogecoin (DOGE), Shiba (SHIB) y Decentraland (MANA) ascendieron hasta situarse en la quinta, sexta y novena posición, respectivamente”, recoge el comunicado.
Aunque Valenzuela reconoce que en el ecosistema crypo no se ha terminado el año ni se ha empezado el 2022 con buen pie, pues venimos un 40% abajo en el par BTC/USD desde máximos, desde noviembre de 2021, espera que “las ramas no nos tapen el bosque”.
De hecho, el experto de eToro también indica a su vez que aunque el fuerte rendimiento del bitcoin durante el periodo navideño ha perdido su impulso en el nuevo año, cada vez más personas empiezan a darse cuenta de que el cripto es una clase de activos que ha llegado para quedarse. “2021 fue un año importante para los criptoactivos. Desde el lanzamiento del ETF ProShares Bitcoin Strategy hasta la conversión del bitcoin de Satoshi Nakamoto en moneda de curso legal en El Salvador y el nacimiento de una “Ciudad Bitcoin”, las criptomonedas se están adoptando cada vez más como un instrumento financiero convencional”, concreta.
Por su parte, Peters indica que de cara al futuro, sería alentador ver cómo una mayor parte del mundo financiero tradicional se adentra en el criptoverso a medida que nos actualizamos globalmente a la Web 3.0, y el enfoque dentro de la industria de los servicios financieros continúa alejándose de la institución hacia el individuo.
“Para que continúe la adopción generalizada de los criptoactivos, los desarrolladores y los arquitectos de la cadena de bloques deben seguir impulsando la innovación y cumplir los hitos establecidos en las hojas de ruta de actualización de las respectivas cadenas de bloques, por ejemplo, Ethereum 2.0”, indica.
Y añade: “Como uno de los sectores más prometedores dentro del mercado de criptoactivos, las finanzas descentralizadas (DeFi) no conocen fronteras. Las redes de blockchain DeFi están dando un giro a la gestión tradicional de la riqueza, con cada vez más instituciones financieras que adoptan esta tecnología innovadora. En abril de 2021, el Banco Europeo de Inversiones (BEI) lanzó un bono de 100 millones de euros en la blockchain de Ethereum, demostrando la intención de seguir innovando en las finanzas tradicionales”.
“Con un número cada vez mayor de usuarios que se involucran en la DeFi a través de préstamos, préstamos, cultivos de rendimiento y el comercio en los intercambios descentralizados, las blockchains subyacentes como Ethereum y Solana seguirán viendo un crecimiento significativo, y como resultado se transpira en la apreciación de sus monedas nativas”, concluye.
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