El Ibex 35 ha registrado una de las peores sesiones tras perder un 1% y quedarse en los 9.177 puntos, el mínimo anual. Las razones se encuentran, principalmente en dos cosas. Por un lado, Donald Trump ha vuelto ha reactivar la guerra comercial asegurando que puede imponer otros 267.000 millones de dólares en aranceles. Mientras que, por otro lado, el FMI ha advertido de la delicada situación del sistema financiero global.

Por si fuera poco, en Alemania se han rebajado las previsiones del año 2018 y las del 2019. Esto unido a la constante tensión italiana ha lastrado con fuerza a todos los mercados del Viejo Continente.

El primer ministro de Italia, Giuseppe Conte, afirmó que, pese al recorte de previsiones del FMI en las previsiones de la economía italiana, espera que en la próxima revisión haya una mejora debido a los nuevos presupuestos. Lo lleva claro... Giuseppe Conte también afirmó que su Gobierno quiere mantener un diálogo razonable con la UE sobre el plan presupuestario y su claro compromiso con la moneda común. Por su parte, el ministro de economía de Italia, Giovanni Tria, reiteraba en su discurso en el Parlamento italiano que el déficit será del 2,4% para 2019.

Además, comentó que se comprometen en reducir de forma considerable el ratio deuda / PIB en los próximos años. Añade que las decisiones políticas están condicionadas por la situación de la deuda y afirma que quiere liberar los sectores que actualmente se encuentran bajo un monopolio. Igualmente apuntó que no es el mejor momento para retrasar la edad de jubilación.

Sin embargo, Luigi Di Maio, solicitó al Banco Central de Italia una reforma de las pensiones. Además, según diferentes fuentes, Giuseppe Conte y Giovanni Tría estarían preparando "roadshow" con inversores para conseguir respaldo a sus bonos.

Como hemos señalado al inicio, Lindsay Dunsmuir de Reuters ha publicado un artículo indicando el FMI ha señalado que los riesgos al sistema financiero global han aumentado en los últimos seis años (cosa de todos conocida) pero podría incrementarse intensamente si las presiones en los mercados emergentes escalaran o las relaciones globales comerciales se deterioran aún más. Esto lo han dicho durante su reunión de agosto con el Banco Mundial en ese resort mundial de turismo que es la isla de Bali, ya que reunirse en EEUU donde los dos organismos residen, es más aburrido y demasiado económico.

Su director de los mercados de capitales, Tobias Adrian (del FMI) ha dicho que los shocks potenciales al sistema podrían aparecer de muchas formas, tales como una inflación superior a la prevista que dispare un salto importante del os tipos de interés o una salida “desordenada” del Reino Unido de la Unión Europea. Pero la severidad del impacto de estos shocks vendrá determinada por las vulnerabilidades que incluyen los niveles de deuda no financiera crecientes, que superan ahora el 250% del PIB, una bajada de los estándares del negocio del préstamo fuera del sector bancario tradicional y precios de activos elevados que podrían caer con fuerza.

También indica el informe que el crecimiento económico parece haber alcanzado la cima en algunas grandes economías mientras que la brecha entre los países avanzados y los mercados emergentes se ha ampliado. Y por eso ha reducido sus previsiones de crecimiento global, debido a la escalada de la guerra comercial entre Trump (perdón, entre EEUU) y China y las crecientes tensiones financieras en los países emergentes.

Esto contrasta con una ralentización en la zona euro y en Japón. La economía china también está mostrando señales de moderación que podrían ampliarse por sus disputas comerciales con Trump, perdón, con EEUU, que ha impuesto aranceles sobre 250.000 millones de dólares en importaciones productos chinos y amenaza con hacerlo sobre otros 267.000 millones más.

Por sectores, el sector del lujo ha caído fuertemente en esta última sesión, por la rebaja de recomendación de Morgan Stanley. También el sector químico ha registrado grandes pérdidas por la rebaja de previsiones del grupo PPG.

El EURUSD está recuperándose en 1,1528 después de haber tocado 1,1481 durante la pasada noche. Su perspectiva es alcista por el momento, aunque la fortaleza del dólar puede volver a repercutir en el euro. Como curiosidad apuntar la increíble subida del franco suizo en los últimos días. El 4 de octubre estaba en 1.1189 frente al euro y ahora está en 1.1429. El motivo es que muchos inversores consideran esta divisa como un valor seguro y se refugian en ella ante situaciones de incertidumbre como la que atraviesa Europa.