Bankia ha obtenido un beneficio neto de 180 millones de euros entre enero y septiembre de este año, esto es, un 68,8% menos que lo logrado hace un año por las mismas fechas. Un recorte que el banco relaciona con el menor resultado generado por las operaciones financieras y con las provisiones que ha llevado a cabo para afrontar las consecuencias de la pandemia. De hecho, en el tercer trimestre ha llevado a cabo una dotación de provisiones extraordinaria de 155 millones de euros, que se añaden a las ya realizadas, para alcanzar un total de 465 millones. 

El presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, habla de un tercer trimestre bueno en términos de negocio bancario y destaca que ya han cumplido uno de los objetivos más relevantes del Plan Estratégico de la entidad para 2018-2020: la generación de los 2.500 millones de euros de capital. Además, Bankia también ha cumplido con el objetivo de la ratio de activos improductivos netos se sitúe por debajo del 3%.

El margen de intereses de la entidad crece un 5,3% frente al segundo trimestre, mientras que los gastos de explotación bajan un 2,8% y las comisiones netas repuntan un 10,5% en tasa interanual acumulada. Así, el resultado core, es decir, el que engloba el margen de intereses y comisiones, menos gastos de explotación, crece un 11,5% en el tercer trimestre en tasa interanual, hasta los 958 millones de euros.

La ratio de capital regulatorio CET1 fully loaded de Bankia se ha situado en el 15,77%, lo que implica una generación de capital de 182 puntos básicos en el trimestre.

Junto a ello, la gestión del riesgo ha permitido situar la tasa de mora en el 4,9%, 10 puntos básicos menos que a cierre de 2019 y la tasa de cobertura sube 4,2 puntos porcentuales con respecto a diciembre y alcanza el 58,2%.