El presidente Donald Trump sugirió que la caída reciente en los mercados de Estados Unidos es una oportunidad de compra para los inversores, aunque muchos analistas culpan a sus políticas y al estancamiento de Washington por la caída.

"Tenemos compañías, las más grandes del mundo, y lo están haciendo realmente bien", dijo Trump a los periodistas en la Casa Blanca.

“Tienen números de récord, de modo que creo que es una gran oportunidad para comprar. Realmente una gran oportunidad para comprar", añadió.

Las acciones de Wall Street extendieron sus caídas hasta Nochebuena, arrastrando el índice de referencia, el S&P 500, a su nivel más bajo en 20 meses. El presidente ha mirado al mercado de valores como un barómetro en su administración, y las caídas lo han enfurecido.

Habló sobre la posibilidad despedir al presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, por los aumentos de los tipos de interés del banco central, a los que Trump y sus aliados culpan de la caída de la bolsa, aunque concluyó que el fin de semana no estaba en su poder, según el secretario del Tesoro Steven Mnuchin. La última racha de ventas se ha producido en medio de la agitación de la Casa Blanca liderada por Trump y el gobierno de Estados Unidos paralizado.

Mnuchin recomendó la nominación de Powell, generando especulaciones de que Trump podría dirigir su ira hacia el secretario del Tesoro, a quien puede despedir más fácilmente. Pero Trump dijo el martes que mantiene la confianza en Mnuchin al asegurar que es "muy talentoso".