Dudas sobre el crecimiento, recrudecimiento de la guerra comercial con consecuencias aún sin determinar y una inflación que sigue baja. Todos estos factores han propiciado el anuncio del BCE de que la ansiada subida de tipos por parte del sector bancario se retrasa al menos hasta el año 2020.

El BCE ha insistido en que tiene la intención de "continuar reinvirtiendo por completo los pagos principales de la deuda que venza bajo el programa de compra de activos por un periodo de tiempo prologando después de que empiecen a subir los tipos de interés". Esas reinversiones se llevarán a cabo el tiempo que sea necesario.

Condiciones de las TLTRO

Además, el BCE ha puesto cifras en este encuentro a las inyecciones de liquidez para la banca, al nuevo programa TLTRO, una nueva ronda de operaciones de financiación a largo plazo que se van a celebrar de forma trimestral a partir de septiembre.

En concreto, el tipo de interés para cada operación se va a fijar 10 puntos básicos por encima del tipo medio aplicado a las operaciones principales de financiación del Eurosistema. Junto a ello, para aquellos bancos cuyos préstamos elegibles superan un valor de referencia, el tipo aplicado será inferior.

Por otra parte, el BCE ha decidido mantener el tipo de interés de referencia para sus operaciones de refinanciación en el 0 por ciento, la tasa de facilidad de depósito en el -0,40 por ciento y la de préstamo en el 0,25 por ciento.