Las bolsas vivieron un nuevo lunes negro, que terminó siendo la peor sesión para los índices europeos tras la victoria del Brexit y la mayor caída en Wall Street en dos años. Todos los principales selectivos perdieron más de un 3% en el día debido a la crisis desatada por la expansión del coronavirus, que ahora amenaza gravemente a Italia y a la economía del país transalpino, que ya es de por sí débil. Pero, la pregunta que cabe hacerse es si las caídas están justificadas y si se verá un repunte en la bolsa.

“El coronavirus es un riesgo pero no debería hacer descarrilar el contexto positivo del respaldo de los beneficios corporativos y la renta variable”, comenta Salman Baig, gestor de Unigestion, sobre el impacto del Coronavirus. Los Growth Nowcaster aún no muestran “un gran impacto del virus en el crecimiento chino o global, pero debería hacerlo si persiste y comienza a arrastrar significativamente la expansión económica”. En términos más generales, las políticas monetarias mundiales se inclinan hacia la flexibilización, lo que “ayudará a apoyar el crecimiento si el coronavirus persiste y se transforma en un riesgo de recesión”.

Por su parte, Frank Häusler, Estratega jefe de Vontobel Asset Management, asegura que: “Las crisis epidémicas pasadas han demostrado que el impacto económico suele ser agudo y temporal”. “El impacto en el crecimiento mundial es, en nuestra opinión, bastante moderado (0,2 puntos porcentuales). Sin embargo, esperamos que esta crisis epidémica no se diferencie de crisis anteriores en cuanto a su naturaleza temporal”, sostiene.

¿Qué aprender del pasado?

En muchas ocasiones, para intuir lo que puede pasar en el futuro es necesario mirar al pasado. Las bolsas han vivido muchos episodios de pánico y volatilidad porque son muy sensibles a los riesgos como el que hay encima de la mesa. “La tranquilidad llegará cuando se encuentre una vacuna y comience a controlarse la epidemia”, señala Joaquín Robles, analista de XTB. Por el momento, ya hay una farmacéutica en Estados Unidos, Moderna, que ha asegurado tener listo el primer lote experimental para humanos.

La última gran caída bursátil europea se dio tras la victoria del Brexit, de hecho, el Ibex llegó a estar en los 8.163 puntos. Sin embargo, solo seis meses después el mercado se recuperó y regresó a los 10.000 puntos. Un comportamiento similar al que vivieron las bolsas del resto del Viejo Continente. En el caso del S&P 500, en solo dos meses se dejó 200 puntos a finales de 2018 debido a la política monetaria de la Fed. Una vez que cambió, el selectivo registró uno de sus mejores cursos.

Todo ello, hace pensar que si el coronavirus no continúa extendiéndose durante mucho tiempo y las primeras vacunas salen al mercado y funcionan, es posible que se registre un rebote bursátil. Aunque, también hay que barajar el peor escenario posible, que sería la de la expansión incontrolada de la enfermedad, y que supondría un fuerte freno a la economía.